Distonía: la enfermedad neurológica relacionada al Parkinson, conoce si la padeces

Descubre de qué se trata esta enfermedad y los síntomas a los que deberías prestarles atención.

Fotografía por: Getty Images

Los temblores musculares pueden ser indicativo del padecimiento de una enfermedad. Es por esto que se debe prestar especial atención a cualquier signo que nuestro cuerpo nos esté enviando. Precisamente, para conocer más sobre este tipo de síntomas, consultamos a un experto en la materia.

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En entrevista con la Revista Cromos, el médico neurólogo y miembro del International Parkinson and Movement Disorder Society, Gustavo Barrios Vincos, nos explica de qué se trata la distonía y las señales de alerta que se deben tener en cuenta para identificar esta enfermedad.

¿Qué es distonía?

Gustavo Barrios Vincos (GBV): “La distonía es una condición neurológica consistente en la presencia de una postura anormal de alguna parte del cuerpo que incluso puede llegar a generar movimientos asociados (temblor distónico). Puede ser una enfermedad cuando se presenta como único síntoma o un síntoma dentro de otra enfermedad, por ejemplo, se puede presentar distonía en la enfermedad de Parkinson”.

¿Cuáles son los tipos de distonía?

GBV: “La clasificación que se usa con mayor frecuencia se relaciona a la distribución corporal del síntoma, que puede ser focal cuando se compromete únicamente un grupo muscular (p.j distonía de los ojos o blefaroespasmo), segmentaria cuando compromete dos grupos musculares contiguos (síndrome de Meige o distonía de ojos y boca), generalizada cuando compromete el tronco y otros dos sitios y multifocal cuando hay dos sitios no contiguos comprometidos”.

¿Cuáles son los síntomas y señales de alerta?

GBV: “Los síntomas iniciales son muy sutiles y dependen exclusivamente del grupo muscular comprometido. La principal señal de alarma es si la distonía inicia en un pie o pierna en adultos o en la cara o cuello en niños ya que puede indicar una causa grave del fenómeno observado”.

¿Cuáles son las causas?

GBV: “La causa más frecuente es presumiblemente genética, aunque en ocasiones no se logra encontrar el gen o problema genético culpable. Otras causas incluyen uso de ciertos medicamentos, lesiones cerebrales o tóxicos”.

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¿Cómo se trata esta enfermedad?

GBV: “El primer paso en el tratamiento es identificar el síntoma y tratar de determinar su origen. El tratamiento más efectivo y ampliamente utilizado es la toxina botulínica, conocida mayoritariamente por sus usos estéticos. Este medicamento relaja el músculo y disminuye los síntomas”.

¿Qué recomendaciones se deben tener en cuenta?

GBV: “La principal recomendación es que cuando se sospeche la condición, se recurra al concepto de un experto para iniciar el estudio del caso y tratamiento pertinente”.