Escabeche de pollo: truco para hacer esta receta con pechuga en 4 pasos

La carne de pollo se ha consolidado como una de las consumidas a nivel mundial. Actualmente, este tipo de proteína hace parte de una dieta equilibrada, por lo que se ha presentado un incremento de demanda en el mercado mundial.

La doctora María del Pilar Castañeda Serrano, citada por el Consejo Mexicano de Carne, ha explicado que el pollo posee múltiples beneficios para el cuerpo. Por ejemplo, esta carne es una gran fuente de minerales como calcio, hierro, zinc, sodio, potasio y magnesio, entre otros.

Puedes leer: ¿Cómo preparar una pechuga de pollo con verduras y arroz?

El pollo es una de las carnes blancas con más propiedades para el organismo.

Fotografía por: Pexels

Así mismo, a diferencia de la carne roja, la de ave es de fácil digestión. Esto se debe a que la mayor parte de la grasa de un pollo se encuentra en la piel, es decir que si la retiras, habrás eliminado considerablemente el sebo.

Otra ventaja que podrás encontrar en el pollo es su sabor neutro, un beneficio para quienes les gusta crear nuevos sabores e impregnarlos a este tipo de carne. Esta propiedad convierte la carne aviar en un alimento altamente versátil.

Teniendo en cuenta lo anterior, uno de los platos que podemos preparar para aprovechar las características mencionadas es el escabeche de pollo con la parte más saludable del ave: la pechuga.

Lee también: Pechuga de pollo: 3 recetas en las que puedes usar este ingrediente

¿Cómo hacer escabeche de pollo?

Marcela Lovegrove, presentadora del programa Recetas de Familia de El Gourmet, ha explicado a través del portal digital del medio especializado en gastronomía, cómo preparar este delicioso plato para que sorprendas a todos tus comensales.

Puedes leer: Pollo sudado: así puedes preparar esta fácil y rápida receta de la abuela

Preparación de un plato de escabeche de pollo

Paso 1

En una sartén, pon a calentar un poco de aceite para dorar el pollo picado en pedazos. Una vez el pollo se haya dorado de un lado, voltéalo para que quede sellado por ambos lados.

Salpimienta para darle un poco de sabor a la carne.

Paso 2

En una cacerola aparte, agrega las zanahorias, las cebollas debidamente picadas, el tomate, la cabeza de ajo a la mitad, las hierbas, la pimienta, el vinagre, el vino blanco y el resto del aceite.

Nuevamente, agrega sal y pimienta al gusto y tapa la olla. Deja que suelte un poco el sabor de lo agregado y añadir el pollo.

Paso 3

Espera a que todo comience a hervir para que te asegures que el pollo esté completamente cocido y la salsa se haya reducido. Esto tardará alrededor de 1 hora.

10 minutos antes de que el pollo esté listo, agrega el zumo de un limón.

Paso 4

Pasada la hora, deja que la preparación se enfríe y reserva en la nevera toda la noche. Al día siguiente, lo puedes consumir como plato frío, acompañado de papas y ensalada.

Ten en cuenta que el pollo debe quedar perfectamente cocido, pues, si está crudo, puedo ocasionar malestares estomacales en las personas que lo consuman.