Foto: The Royal Palace
La ‘favorita’ de la Reina Isabel II va cobrando gran protagonismo en la vida social de la familia real y en los medios del Reino Unido. La condesa de Wessex, de 55 años, ha regresado de su viaje oficial a Sudán del Sur, convirtiéndose en el primer miembro de la familia en visitar ese país. Esta semana los miembros de la realeza británica estuvieron reunidos en la ceremonia del Día del Commonwealth, en Londres. Allí, Sofía lució un vestido de la marca de vestidos Suzzanah, especializada en moda femenina que combina el corte clásico inglés con toques contemporáneos de la mujer actual.
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La condesa no ha pasado desapercibida entre los invitados y los flashes de las cámaras, por su vestido blanco de corte clásico y cuello mock combinado con unos toques en azul marino aplicados en la falda del vestido a través de una línea que cruza en diagonal y que le da un toque diferente a su silueta. Además de ser una de las mejores vestidas de la realeza, sin duda alguna, es una de las mujeres que ha sido personal shopper de la familia real y se ha tomado la libertad de elegir prendas para su suegra como también para la duquesa de Cambridge, Kate Middleton.
Eduardo y Sofía estuvieron 6 años de novios, y se casaron en 1996, en la Capilla de San Jorge del Castillo de Windsor. En ese momento recibieron los títulos de conde y condesa de Wessex. Tienen dos hijos llamados Luisa y Jacobo. Sofía creció en el condado de kent, donde comenzó a desarrollar su carrera de relaciones públicas. Es hija de un vendedor de neumáticos y una secretaria. Conoció a su actual esposo cuando en una fiesta que ella misma había organizado, después de un partido de tenis benéfico.