¿Por qué Chapinero se posiciona como una de las zonas más excitantes de Bogotá?

Bogotá es una ciudad que nunca descansa y esto lo sabe muy bien Chapinero, una zona que cada vez de pone más en tendencia por la diversidad de propuestas para los bogotanos y habitantes de la capital colombiana. A propósito, Hab Hotel es una gran demostración de esto.

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Llevan más de dos años en la industria, tiene una propuesta con conceptos de diseño e innovación, cuyo resultado hace que la experiencia de los visitantes sea fácil de recordar, un toque moderno, pero vintage, un espacio hogareño, pero cool, son diversos los motivos por los que vale la pena pasar la noche aquí o simplemente disfrutar de una deliciosa comida con la mejor compañía.

Cromos conversó con Nicolás Vergara, cofundador de Hab, para conocer un poco más del arte que esconde este espacio y también del concepto farm to table que destaca en su cocina.

Cromos: ¿Qué nos puedes decir del espacio dónde se encuentra Hab?

Nicolás Vergara: En el centro tenemos una casa de estilo británico construida en los años cuarenta. Definitivamente una de las más grandes y especiales de Chapinero. A cada lado se encuentran remodelaciones con un estilo arquitectónico más moderno. Pienso que Ana María Calle, la arquitecta, logró crear una integración entre lo clásico y lo moderno muy especial.

C: ¿Por qué Chapinero se está posicionando como uno de los espacios más excitantes a nivel cultural y turístico?

NV: Chapinero es un lugar en el que viven personas bohemias, creativas, sensibles… Esto hizo que jóvenes chefs del barrio empezaran a abrir restaurantes con propuestas mucho más innovadoras que lo que venía pasando en Bogotá. Sus amigos y vecinos comenzaron a frecuentar estos nuevos restaurantes, creándose un círculo virtuoso muy interesante. Hoy en día en Chapinero Alto tenemos la mejor oferta gastronómica del país. Hace algunos años esto parecía imposible. Creo que solo estamos empezando. Espero que sigan abriéndose restaurantes con propuestas cada vez más innovadoras. Es lo que necesita el país”.

C: ¿Cómo ha ido creciendo Hab en estos años de existencia?

NV: Empezamos en la mitad del confinamiento, tal vez el peor momento para abrir un hotel, así que desde entonces hemos venido creciendo sostenidamente. El final del año pasado fue excelente, el comienzo del actual también. Bajó un poco en mayo y junio, estamos teniendo un muy buen julio y esperamos un agosto muy sólido también.

C: ¿Qué es el farm to table y por qué dirías que es tan importante implementar este tipo de prácticas?

NV: La idea es crear una oferta gastronómica basada en lo que se produce cerca del restaurante. En nuestro caso, además de eso, tenemos una granja orgánica propia que nos suministra gran parte de las verduras y los corderos. Desde que conocí el concepto me pareció lógico, práctico, una forma de ayuda al medio ambiente con hechos reales, bajar la huella de carbono de los productos que se ofrecen en los restaurantes es importante.

Además, se busca educar al consumidor en que, a pesar de que un atún traído de Japón puede ser delicioso, realmente no es necesario, al menos no en nuestro consumo del día a día. Nuestros clientes disfrutan de ingredientes muy frescos, la mayoría producidos en la Sabana de Bogotá, muchos orgánicos y cultivados por pequeños productores.

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C: ¿Qué crees que hace tan característica la propuesta gastronómica de Hab?

NV: Creemos que menos es más, que no es necesario adicionar tantos ingredientes a un buen plato, que el ingrediente debe ser el protagonista, que además de deliciosa, la comida debe ser saludable, debe sentar bien. Muchos de nuestros clientes son extranjeros que están llegando a Latinoamérica tal vez por primera vez, muchos nunca habían estado a 2.600 metros de altura, ellos aprecian mucho la calidad de la comida, una vez la prueban, en la mayoría de los casos siguen comiendo en Hab Café durante toda la permanencia en el hotel.

C: ¿Qué es lo que más te llena de orgullo sobre este proyecto?

NV: Mostrar una Colombia más sofisticada, más orgullosa de sí misma, pero más cosmopolita a la vez. Me enorgullece profundamente ver cómo miles de extranjeros se despiden de nosotros con una gran sonrisa y un gesto de agradecimiento. Esto alegra profundamente a nuestro equipo. Hace su trabajo más significativo.