Los gatos son animales de compañía que, aunque muchos digan que son muy independientes, aman a sus dueños. Los felinos son seres muy especiales y si conoces las cosas que más disfruta, seguro lo harás feliz.
Adoptar una mascota requiere de muchos factores para mantenerla saludable. Además, debes tener en cuenta que son animales muy inteligentes y se caracterizan por su belleza.
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Aunque pareciera que fueran a veces muy temperamentales, estos animalitos también son un amor y si aprendes a conocerlos todo será más fácil.
Por ejemplo, las personas que tienen gatos saben que estos animales no expresan sus molestias o dolores como los perros. Aunque entender cuándo el minino está enfermo o necesita algo es todo un reto, es necesario estar atento para que tengan una vida feliz.
Una de las enfermedades a las que más temor se tiene al tener un felino es la leucemia. La cual, es una afección infectocontagiosa que se considera grave, pero, muy común. Es provocada por el virus FeLV o virus de la leucemia felina.
La leucemia en gatos genera en el animal problemas con el sistema inmunológico, es decir, que a diario se expone a una variedad de bacterias que pueden afectar su estado de salud con frecuencia y llevarlo a gastos frecuentes con el veterinario.
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Los gatos requieren de atenciones frecuentes y visitas al veterinario.
Síntomas de leucemia en gatos
Víctor Sánchez Grau, veterinario, ha escrito para el portal especializado Experto Animal cuáles son aquellos síntomas relacionados con la leucemia en un minino. Aquí te dejamos algunos de ellos para que los tengas en cuenta y prestes atención a tu gato:
- Fiebre.
- Cansancio.
- Anemia.
- Anorexia.
- Letargia.
- Somnolencia.
- Pérdida de peso.
- Convulsiones.
- Lesiones en la piel.
- Problemas renales, respiratorios o gastrointestinales.
- Debilidad.
- Diarrea, entre otros.
Debes tener en cuenta que existen muchas formas para que tu gato se contagie de leucemia. La más frecuente es que nazca con ella pues se le pega dentro del útero, en el periodo de lactancia o mediante el intercambio de fluidos corporales.
Por ejemplo, el aseo mutuo, el uso de la misma caja de arena o el compartir platos de comida, puede ocasionar que se causen peleas y cuando una de estas heridas queda expuesta, se pueden contagiar del virus.
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Así mismo, todos los gatos son propensos a padecer leucemia. Sin embargo, los cachorros y los gatos jóvenes son los que mayor riesgo corren. Por ello, si lo que quieres es alargar la esperanza de vida de tu minino debes acudir a un especialista para que la mantenga controlada o la prevenga.
Finalmente, es importante señalar que la leucemia en gatos no tiene cura, pero con el tratamiento adecuado el felino puede llegar a tener una vida normal. Entre los cuidados de una mascota con este padecimiento están los antivirales, el suministro de vitaminas y los inmunorreguladores, todos ellos, recetados por un veterinario.