El embarazo: en la décima semana la barriga empieza a crecer

A medida que termina el primer trimestre, el bebé es más evidente para el resto del mundo y se reducen los riesgos de un aborto espontáneo.

Por Redacción Cromos

21 de junio de 2018

Getty

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Hasta ahora el embarazo ha sido como un sueño. Sabes que llevas algo que crece en tu interior pero no lo ves ni lo sientes. A veces crees que es mentira y, si has tenido la fortuna de no sufrir náuseas matutinas, tu vida ha transcurrido como siempre, sin ningún cambio, aunque te mueres de ganas de que el resto del mundo sea consciente de eso por lo que estás pasando.

A partir de esta semana, no obstante, es probable que el embarazo empiece a notarse. Si aún no has dado la noticia a tus familiares y amigos, cada vez será más difícil ocultarla. Desde ahora, subirás de peso a un ritmo más rápido y, por lo tanto, debes pesarte con mayor frecuencia para asegurarte de estar aumentando de una manera saludable y no en exceso. Como lo hemos mencionado anteriormente, se calcula que una mujer sube un kilo por mes de embarazo. Si ves que has pasado esa cifra, es posible que tu obstetra te dé una dieta especial, ya que el sobrepeso puede afectar el embarazo y el parto.

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Por estos días también empezarás a disfrutar más tu condición, ya que la turbulencia emocional se reduce y el rebote también. Estos síntomas cambiarán por unos más llevaderos, como el aumento del flujo vaginal, que podrás manejar sin problema con el uso de protectores diarios. Esta respuesta de tu cuerpo es completamente normal, pero vale la pena que revises si el flujo se mantiene blanco y delgado, ya que podrías tener una infección si cambia a amarillo o verde y si se vuelve más grueso.   

Por otra parte, tus venas serán más visibles, ya que producirás sangre extra para el bebé. Tu flujo sanguíneo aumentará entre el 30% y el 50% durante el embarazo. Si tienes una historia clínica que incluye problemas cardiacos es recomendable estar vigilante, ya que tu corazón tendrá que esforzarse más. Así mismo, si tienes un componente hereditario, puede que te encuentres con várices o ‘arañas vasculares’ que también son normales. Para que las várices de las piernas no se expandan demasiado y no molesten, existen medias especializadas que podrás encontrar en ciertas farmacias.  

 

El bebé

Tiene el tamaño de una naranja enana y sus facciones humanas empiezan a ser más evidentes. Su sistema digestivo también es funcional en este punto y, como el latido de su corazón se siente –y palpita hasta tres veces más rápido que el tuyo–, las estadísticas dicen que la posibilidad de un aborto espontáneo se han reducido en una gran medida. Con ese corazón a mil, ese chiquito se la pasa bailando y pedaleando en tu interior. En una ecografía podrás verlo.

 

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Fuentes

Ovia Health

Sir John Dewhurst. Dewhurst's Textbook of Obstetrics and Gynaecology.

Susan Storck et al. "Fetal Development." U.S National Library of Medicine. MedlinePlus.

"Fetal Growth Chart." BabyYourBaby. Utah Department of Health, n.d. Web.

Por Redacción Cromos

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