3 usos para el bicarbonato de sodio en el hogar además de la cocina y la limpieza

El bicarbonato de sodio es un gran aliado en el hogar, además de ayudarnos a cocinar, sus usos van desde ayudarnos a darle consistencia y lograr buenas texturas esponjosas en la repostería, hasta trucos de limpieza que nos sorprenden por su eficacia, hasta el cuidado de plantas.

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Otros lo utilizan también como repelente, por eso esta vez te daremos 3 usos diferentes que puedes aprovechar del bicarbonato y que tal vez no conozcas.

Elimina los malos olores

El bicarbonato es perfecto para eliminar los malos olores en sifones, coladores, contenedores, etc. Gracias a sus propiedades puede neutralizar rápidamente aromas desagradables de las tuberías, por acumulación de comida o alimentos que se pueden pudrir. Puedes utilizarlo en conjunto con el vinagre para aprovecharlo mejor. Vierte bicarbonato y luego el vinagre. A los 15 minutos puedes agregar agua hirviendo y verás la diferencia, no habrá olores.

Aunque te recomendamos el vinagre blanco, también puedes usar el vinagre de manzana con el bicarbonato para eliminar malos olores.

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Es un fungicida perfecto para plantas

El bicarbonato de sodio logra modificar el pH del sustrato de tus cultivos, es decir, su acidez, y evita que los hongos se desarrollen. Es decir, el bicarbonato es un excelente fungicida natural que protege tus plantas de hongos difíciles de erradicar. Para esto puedes usar una cucharadita de bicarbonato y otra de jabón neutro natural y mezclarlos en un litro de agua. Luego puedes regarlo en la tierra e incluso con un spray usarlo sobre la planta. Utilízalo especialmente si tus plantas están sufriendo de hongos, no es necesario usarlo de manera preventiva.

Es ideal para limpiar joyería

La joyería y los elementos de plata pueden perder su brillo con el paso del tiempo. Puedes verla con manchas, opacas, e incluso pensar que se han echado a perder tus accesorios favoritos. Sin embargo, esto es normal y el bicarbonato puede ayudar a que esa joyería vuelva a brillar como nueva. Para lograrlo, solo debes usar una cucharadita de bicarbonato y un cuarto de taza de vinagre en un litro de agua caliente, no hirviendo. Puedes dejar remojar los elementos de plata, sean cubiertos, copas, cadenas, anillos, o cualquier objeto preciado de plata en esta mezcla de forma muy breve. Luego puedes secarlos y frotarlos con un paño seco y así los dejarás limpios.

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