Los gatos son las estrellas de Instagram, sin proponérselo, simplemente con ser, provocan sonrisas y dan ganas de adoptar más. Ya sea en modo juego, alimentación o hasta durmiendo, verlos en pantalla genera una respuesta emocional inmediata, casi siempre positiva.
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Sigue a Cromos en WhatsAppPero no todo puede ser objeto de entretenimiento, hay cosas que los gatos odian. Por su comportamiento único y personalidades distintivas, los gatos odian actitudes muy puntuales. Para nadie es un secreto que tienen aversiones específicas hacia ciertas conductas.
Aunque cada “michi” tiene sus preferencias, hay ciertas acciones humanas comunes que muchos gatos detestan.
Los gatos odian que los encierren.
10 cosas que los gatos odian de los humanos
- Abrazarlos, cargarlos, levantarlos del suelo: Los gatos suelen preferir que las interacciones físicas sean en sus propios términos. Los abrazos prolongados, acariciarlos cuando no tienen ganas o levantarlos inesperadamente pueden ser molestos para ellos.
- Los ruidos y movimientos inesperados: Los movimientos rápidos o impredecibles y los ruidos fuertes pueden asustar o estresar a los gatos. Esto incluye gritar, aplaudir fuerte o mover muebles de repente.
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- Decidir por ellos: Los gatos valoran su independencia. Forzarlos a jugar o demandar su atención cuando quieren estar solos puede resultarles molesto.
- Modificaciones a su ámbito: A los felinos domésticos les gustan las rutinas y un entorno familiar. Cambios repentinos en su hogar, como reorganizar los muebles o introducir nuevos olores, pueden causarles estrés.
- ¿Y sus necesidades básicas?: No atender adecuadamente sus necesidades, como una caja de arena sucia, falta de agua fresca o ignorar sus señales de hambre o malestar, puede causarles frustración.
- Los terribles baños forzados: Aunque necesarios a veces, generalmente detestan tomar medicamentos o ser bañados.
- La cercanía excesiva: En el lenguaje corporal felino, el contacto visual directo y prolongado es señal de agresión. Los humanos que sostienen la mirada con un gato pueden hacerlo sentir incómodo o amenazado.
- Su espacio personal: Algunos gatos son tímidos o reservados, especialmente alrededor de personas desconocidas. La intrusión de extraños en su espacio personal puede ser particularmente perturbadora.
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- Los olores que irritan: tienen un sentido del olfato muy desarrollado, y los olores fuertes o artificiales pueden ser abrumadores o desagradables para ellos.
- El aburrimiento: Los gatos necesitan un entorno estimulante con oportunidades para jugar y explorar. La falta de estímulo puede llevar al aburrimiento o la frustración.
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