Guillermo Ramírez, quien se autodenomina «simplemente un pasajero», se dio a la tarea de encontrar la causa del dolor de cabeza diario de los bogotanos: el Transmilenio. Ramírez propone una solución sencilla.
Por El Espectador
08 de septiembre de 2014
Noticias imperdibles en nuestro canal de Whatsapp ¡Únete ya!
Este sitio usa cookies. En caso de seguir navegando se entenderá que usted ha otorgado una autorización mediante una manifestación inequívoca para su uso