La acumulación de suciedad en las gafas puede afectar la calidad del rendimiento visual. Al mantener las lentes limpias, garantizas que puedas aprovechar al máximo la corrección visual que ofrecen las gafas.
Si siempre están impecables, gozarás de una visión clara y preservarás la durabilidad de las lentes. Incorporar el cuidado regular en tu rutina diaria es clave para maximizar su eficacia y prolongar su vida útil.
Sigue a Cromos en WhatsAppLee también aquí: La ropa interior: cómo lavarla para evitar infecciones. No lo hagas en la ducha
Limpiar las gafas: ¿cómo hacerlo?
Utiliza un paño de microfibra
Los paños de microfibra son ideales para limpiar gafas, ya que son suaves y no dejan pelusa. Humedece ligeramente el paño con agua tibia y frota suavemente las lentes en movimientos circulares. Esto ayudará a eliminar la grasa y las partículas sin rayar el vidrio.
Jabón suave y agua tibia
Lava las gafas con agua tibia y un jabón suave, preferiblemente uno que no contenga fragancias ni aditivos agresivos. Enjuaga bien para eliminar cualquier residuo de jabón y seca las gafas con un paño de microfibra. Este método es suave pero efectivo para eliminar la grasa.
Alcohol isopropílico
Si las gafas están grasosas, puedes usar una mezcla de alcohol isopropílico y agua en partes iguales. Aplica la solución con un paño de microfibra y frota suavemente las lentes. Asegúrate de que el paño esté limpio y libre de partículas que puedan causar arañazos.
Te puede interesar: ¿Cómo lavar y desinfectar el brócoli para eliminar pequeños gusanos o lombrices?
Spray
Los sprays limpiadores específicos para gafas son una opción conveniente y eficaz. Rocía una pequeña cantidad en ambas caras de las lentes y utiliza un paño de microfibra para limpiarlas. Estos productos suelen estar diseñados para no dejar residuos y ofrecen una limpieza eficiente.
Ojo con limpiar en seco
Evita limpiar las gafas en seco, ya que esto puede provocar rayones en las lentes. La suciedad y los residuos en seco pueden actuar como abrasivos y dañar la superficie del vidrio. Siempre humedece las gafas antes de limpiarlas para facilitar la eliminación de partículas.
Recuerda prescindir del papel de cocina, servilletas o la ropa para limpiar las gafas, ya que estos materiales pueden rayar las lentes. Además, evita usar limpiadores domésticos comunes, ya que pueden contener químicos abrasivos que dañarían los recubrimientos especiales de las gafas. Con estos métodos suaves y efectivos, mantendrás tus gafas limpias y protegidas.
Si quieres leer más notas de estilo de vida, ingresa aquí.
