El diente de león suele ser considerado como maleza, pero tiene diferentes propiedades que pueden contribuir a mejorar ciertos aspectos de salud.
Te puede interesar: ¿La ruda adelgaza? Conoce los efectos detrás de esta planta medicinal
Sigue a Cromos en WhatsAppTe invitamos a leer más contenidos como este aquí
En la mayoría de los adultos sanos, el consumo moderado de diente de león se considera seguro, sin embargo, el consumo de ella en exceso, también tiene sus contraindicaciones.
¿Qué contraindicaciones tiene el diente de león?
La recomendación general antes de “consumir diente de león, ya sea en comprimidos, extractos u hojas, es consultar al médico. Esto, sobre todo si estamos bajo algún tratamiento con medicamentos o si tenemos alguna patología específica. Veamos en detalle quienes deberían evitar su consumo”, destaca la web Mejor con Salud.
Por lo general, la dosis básica utilizada de diente de león, varía según la forma en que se consuma. “En el caso de las raíz seca, el consumo estándar es de 2 a 8 gramos 2 a 3 veces al día. Por su parte, el extracto es de 250 miligramos 3 a 4 veces al día”.
Diente de león
Cuando se emplea en dosis correctas, tanto la raíz como las hojas del diente de león suelen ser seguras. No obstante, “es importante conocer algunos casos en los que está contraindicado. Información recopilada por la corporación estadounidense WebMD señala que dichos casos incluyen”.
- Embarazo y lactancia: no hay estudios que revelen información “sobre la ingesta segura de diente de león en estas etapas. Por lo tanto, se desaconseja su consumo”.
- Enfermedades de la vesícula biliar: la raíz de diente de león “es un potente estimulador de la secreción y el flujo biliar. Por tal motivo, no se recomienda su consumo en personas con obstrucción de los conductos biliares o patologías de la vesícula, como los cálculos biliares”, señala Mejor con Salud.
- Eccema: los pacientes con esta enfermedad cutánea “parecen tener más probabilidades de presentar una reacción alérgica al diente de león. Por esta razón, en caso de padecer este problema, es primordial consultar primero al médico antes de optar por su consumo”.
- Gastritis y úlceras gástricas: el diente de león “puede causar en algunas personas aumento de la secreción de ácidos a nivel estomacal. Este efecto es dañino para los pacientes con inflamación, erosión o úlceras gástricas, ya que empeora la evolución de la enfermedad y empeora el dolor”.
- Trastornos hemorrágicos: los pacientes con este tipo de trastornos “deben evitar el diente de león porque puede incrementar el riesgo de hematomas al ralentizar la coagulación sanguínea”.
- Alergia a la ambrosía: tener alergia a la ambrosía “y plantas como las margaritas, la manzanilla o los crisantemos alerta de un posible riesgo de alergia al diente de león. Si bien hay información contradictoria al respecto, es mejor abstenerse de su consumo y preguntar al profesional sanitario”.
- Insuficiencia renal: la razón es que puede incrementar el riesgo de complicaciones renales porque disminuye la cantidad de oxalatos que se liberan a través de la orina.
