Que era ágil, con facilidad para regatear rivales como si estuviera bailando y, sobre todo, carismático dentro de la cancha. Que era el opuesto de Willington Ortíz, su contraparte. Y que mientras se consagraba con Santa Fe en la década del 70, Ortíz lo hacía con Millonarios.
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Sigue a Cromos en WhatsAppJosé Ernesto Díaz fue campeón dos veces con el club cardenal (1971 y 1975). También formó parte de la selección de Colombia subcampeona de la Copa América de 1975 (por detrás de Perú). Pero por lo que más se le recuerda es por haber sido el primer colombiano en ser transferido de la liga local al fútbol europeo.
Fue en 1976, cuando el Standard de Lieja lo fichó como su gran refuerzo. Llegó con altas expectativas y una lesión lo mantuvo alejado de las canchas por un buen tiempo.
Claro, el frío de Bélgica también lo golpeó -como lo confesaría más adelante- al igual que la nostalgia de la soledad. Díaz regresó al país y una década después se retiró del fútbol profesional.
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Más allá de las pocas actuaciones en Europa y de la convocatoria constante para jugar la Copa de la Uefa (hoy Europa League) con el club belga, su viaje abrió la puerta para que una década después comenzara el éxodo masivo de futbolistas colombianos, para que jugar al otro lado del Atlántico fuera una realidad y no un anhelo lejano.
Díaz murió de un ataque al corazón en 2002 a los 49 años.